Ayer escuché un video de un psicólogo que hablaba de la convivencia. Se llamaba Rafael Santandreu. Le hacían una entrevista porque ha escrito un libro y ha vendido más de 50.000 ejemplares. Me parece curioso que necesitemos un manual para lo que tanto deseamos y tanto nos cuesta pero me pareció muy entretenido. Decía, entre otras cosas, que el secreto de la buena convivencia entre parejas o amigos es no exigir ni recriminarle al otro absolutamente nada. No es que no deseemos que el otro no nos complazca , sino que la mejor manera de conseguirlo es sugiriendo, no reprochando.
Puso el ejemplo de que llega tu pareja a casa cansada y estresada del trabajo y monta un estropicio,rompe la vajilla y la cristalería. Tu, que haces? Vas tranquilamente a la tienda de 24 horas y suplantas esa vajilla por otra, haces una exquisita cena para dos y pones buena cara. Al cabo de unos días, le dejas una nota diciendo: "cariño , preferiría que no reproduzcas el episodio del otro día, pero si alguna vez no pudieras remediarlo y lo volvieras a hacer, YO TE QUERRÉ IGUAL". Bravo! Pensé yo. Hay que tenerlo muy claro para pensar así, pero me gusta, si Señor Santandreu. El decía que egoistamente si hacemos esto , nosotros mismos nos ahorramos el pasarlo mal ya que se consiguen muchas más cosas de la otra persona utilizando la sutileza que el enfrentamiento. A lo que le doy la razón al 100%.
Por cierto , hace un año que por sugerencia de mi hija empecé a escribir este blog, quizás porque nadie me ha exigido nada he convivido tan a gusto con todos los que lo leeis. Os estoy muy agradecida porque lo hago muy a gusto. Y ahora, lo mas dificil, a practicar!