Vuelvo a escribir sobre aquel niño de ojos azules que el día 26 de Febrero saco una manzana para merendar en el autobús y su hermana se puso a leer un libro porque siguen superando mis espectativas. Mismo bus. Misma hora. Suben. Hablan y bromean entre ellos. Se sientan enfrente mío. Y esta vez sacan UNA PARTITURA DE MÚSICA y se ponen a cantar. Se ríen si uno se equivoca de nota y bromean al respecto Es tan sorprendente y contrasta tanto con el resto de niños que me tienen pasmada. Son como de otra galaxia. Me imagino historias sobre su familia ¿ Cantaran todos alrededor del piano los Domingos? Me encantaría felicitar a sus padres porque tienen unos hijos estupendos. Bajo sonriendo dejando flotar mi imaginación.