He aprendido que para volver, antes hay que ir, que para apreciar el silencio tiene que haber ruido, que respetar es el opuesto de mandar, que para encontrarse a uno mismo es bueno estar perdido, que dar consejos es lo mas fácil que hay pero a menudo lo que menos desean los demás, que para oír hay que escuchar y que estar callado y atento es una buena forma de comunicación, que la paciencia debería ser una asignatura para toda la vida y la más importante a cultivar, que hay que dar libertad antes de que nos la exijan, que pedir perdón es de las mayores alegrías y que el infinitivo del verbo aprender no se usa, sino que el gerundio es su forma natural, APRENDIENDO...