El otro día escribi en facebook la frase siguiente: Desde que Artur Mas es Presidente de nuestra comunidad han cerrado 16.000 empresas , lo leí en la prensa. Rápidamente muchos me dijeron que no era el unico culpable y que era demasiado fácil apuntar con el dedo a una única persona. Bien. Es cierto. Pero planteo la siguiente comparación: Vas a un concierto que ha sido ampliamente anunciado en la prensa. Tienes una localidad estupenda por la que has pagado un buen dinero . Te instalas en un asiento cómodo. El escenario es grande. Hay muchos músicos. La expectación es máxima. Entra el director. Saluda. Todos aplauden. Se respira la magia en la sala. El director se coloca en el centro del escenario . Los músicos se preparan y a la señal de la batuta empiezan a tocar. Al principio estas en la gloria, el programa es bueno. Cierras los ojos y te trasladas al nirvana. Pero de repente,un músico desafina y toca una nota discordante. Te sorprendes. Al cabo de poco otro hace lo mismo. ¿Que pasa? La pieza se convierte en un caos. El Director intenta transmitir tranquilidad pero ya la gente empieza a silbar y abandonar la sala. Pues bien. El Director es el que ha ensayado la obra con sus músicos y los ha elegido. Tiene que negociar las subvenciones y elegir sus colaboradores. Y al final es el que da la cara ante el público. Por eso en definitiva es el responsable de que la pieza esté bien interpretada.
