Ayer tenía que coser un tejano. Como siempre, cogí mi caja de costura y me puse el dedal. No es un dedal cualquiera. Es de plata y en relieve representa a unos alumnos perros y pavo real que atienden al profesor que es un mono. Es uno de mis mayores tesoros porque era de mi abuela. Cuando se murió, se lo pedí a mi madre y ella muy comprensiva, me lo dio. Recordar a mi abuela es una cosa que me enternece y me gusta muchísimo. Persona alegre y generosa, tenía tiempo para cada uno de su gran familia. Cuando la llamabas estaba siempre contenta. Ahora me pregunto como lo debía hacer, lo de estar siempre contenta. Ya me lo dice mi hija, que es mucho mejor estar contento porque todo fluye mucho mejor. Y tiene razón. Los contentos atraen , tienen imán. Todos queremos estar con personas alegres porque contagian optimismo. Reírse es una de las mejores terapias para el corazón y si es a carcajadas, mejor . Os mando una enorme sonrisa de Domingo , como dice nuestra profe de yoga, REGALAOS UNA SONRISA, es bonito, verdad?
